El Ministerio de Justicia tiene el lamentable deber de informar sobre el sensible fallecimiento de Pilar Coll Torrente, miembro del Consejo de Reparaciones, ocurrido hoy en una clínica local de Lima.
Coll fue designada, en el año 2006, como integrante del Consejo de Reparaciones, órgano actualmente adscrito al Ministerio de Justicia y encargado de elaborar el Registro Único de Víctimas, en el que se inscribe a las víctimas y beneficiarios de los programas de reparación que el Estado implementa.
La ministra de Justicia, Eda Rivas, expresó sus condolencias a los familiares y resaltó el trabajo activo de Coll, su gran labor y compromiso, su inmenso amor por nuestro país y la lucha incansable que, hasta el día de hoy, con seguridad, ha realizado a favor de los más necesitados del Perú.
Coll Torrente tuvo una larga trayectoria como activista en la defensa de los derechos humanos en nuestro país. Nacida en España, llegó al Perú en 1967 y trabajó enseñando religión en la Escuela de Servicios Sociales.
A partir de 1978, inició su trabajo pastoral en diversos centros penitenciarios. Posteriormente, y hasta 1987, trabajó en el distrito de El Agustino. En ese año, fue elegida como la primera secretaria ejecutiva de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos.
En el año 1993, fue condecorada con la Orden de Isabel La Católica por el rey Juan Carlos I. Ella recibió el premio con alegría, pero también con la humildad que siempre la caracterizó, pues, como ella misma dijo, le hubiese gustado que “se hubiera avanzado mucho más en una sociedad con menos diferencias".
Al recibir este significativo homenaje, y durante muchos años más, realizó su trabajo para las personas que fueron privadas de su libertad injustamente, por delitos de terrorismo. Gracias a esta perseverancia, esos ciudadanos recuperaron sus vidas.
Coll también fue promotora de la creación de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación y una vez aprobada, el Plan Integral de Reparaciones y el Registro Único de Víctimas del período de violencia política pasó a formar parte, en 2006, del Consejo de Reparaciones
En el año 2008 recibió la Medalla de la Defensoría del Pueblo, que es una distinción nacional que se otorga en reconocimiento público de las personas o instituciones, nacionales o extranjeras, que destaquen notablemente en la promoción, defensa y consolidación de la democracia y la vigencia de los derechos humanos en nuestro país.
Sus restos serán velados en el Colegio de Jesús, ubicado en la cuadra 26 de la avenida Brasil, a partir de las 18 horas.
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