Úrsula Freundt-Thurne, periodista y decana de la Facultad de Comunicaciones de la UPC. (Foto: César Pérez/CONCORTV).
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Por César Pérez Sulca/Alexander Chiu Werner | CONCORTV
La labor periodística tiene una gran importancia en el desarrollo de una democracia pero también conlleva a una responsabilidad con la sociedad, en especial con la formación integral de los niños y adolescentes. Hace algunas semanas el Consejo Consultivo de Radio y Televisión (CONCORTV) emitió un pronunciamiento por el tratamiento inapropiado del caso de la violación de un padre a su hijo menor de edad difundido en el programa “La Noche es Mía” de Frecuencia Latina.
Sobre esto, el CONCORTV conversó con la periodista y decana de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, Úrsula Freundt-Thurne, para que pueda compartirnos su punto de vista acerca de este suceso y reflexionar sobre la formación periodística y su responsabilidad en el manejo de las noticias.
El tratamiento de la información
Para Freundt-Thurne, el caso de ‘La Noche es Mía’ es una clara falta de organización por parte de los periodistas involucrados en el tema. "Ha habido un manejo irresponsable de la información por parte de la periodista de dicho canal. Pero también hay una evidencia de falta de sentido común, y eso es muy difícil de enseñar en alguna universidad o academia. No puede ser posible que a una periodista se le ocurra aprovechar la situación tan complicada de un niño para conseguir una nota o entrevista de esa magnitud."
Menciona además que para ser un buen periodista se debe tener conocimiento en las premisas, deberes y derechos del periodista, como también conocer los protocolos para cubrir casos especiales como el de la violación a menores de edad. De igual importancia es recordar que existe una dinámica en el proceso de producción de noticias, la cual se ha visto alterada con el caso mencionado.
Para Freundt-Thurne, "hay un antes, un durante y un después en la elaboración de noticias. En el reportaje del programa de Carlín se ha perdido la brújula con respecto a este procedimiento. Esto demuestra que no hay un director periodístico que oriente a su equipo a elaborar noticias de buena calidad, como tampoco una reflexión por parte de los periodistas del programa, los cuales, al parecer, le dan más valor a la inmediatez noticiosa."
Asimismo, resaltó que el mal resultado de este informe periodístico debería hacer recapacitar al medio de comunicación (Frecuencia Latina) y que para poder enmedar este error "se necesita de periodistas más capacitados, dar más tiempo a la reflexión y no abordar temas sumamente delicados sin antes hacer una investigación adecuada para cubrirlos de manera responsable."
La labor académica en la formación periodística
Para lograr estos objetivos, sería imprescindinble una buena organización de las universidades y escuelas que permitan desarrollar personas capaces de ejercer el periodismo de forma consciente y que posean un nivel de responsabildad mayor ante casos tan delicados como el analizado. Para la periodista, "en la universidad los estudiantes tienen la oportunidad de poder equivocarse. De esta manera puede aprender de sus errores y rehacer el trabajo con nuestra asesoría."
Otra forma de conseguir que los estudiantes tengan un mayor nivel de análisis para determinadas situaciones es tratar de incorporar estos casos del día a día como prácticas periodísticas que sirvan para ejercitar la labor como profesionales. Freundt-Thurne señala que "los jóvenes deben saber cómo actuar frente a situaciones de este tipo. Nosotros podríamos preguntarles ‘¿cómo hubieras tratado este caso?’ o ‘¿qué hubieras hecho tú en el lugar de la reportera?’. Es fundamental que aprendan a elaborar sus propias opiniones al respecto y desarrollar diversas perspectivas de los tan variados casos que se viven en el acontecer noticioso.
Pero lograr formar opiniones certeras y veraces en el periodismo no es tarea fácil. Freundt-Thurne concluye mencionando que "la credibilidad y confianza son características difíciles de ganar. Eso se logra con el tiempo y, por supuesto, ejerciendo de manera responsable la labor del periodismo. Ejercerlo implica un compromiso social y un reto. No por obtener una primicia a costa de dañar los derechos de los demás (en este caso, de los niños) vas a ser un buen periodista. Un buen periodista que sabe acerca de los premisas, deberes y derechos, como también conoce el procedimiento de elaboración de noticias, puede obtener resultados extraordinarios."
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