sábado, 6 de agosto de 2011

Libro “Los peruanos” se presentará en Trujillo el jueves 11

NOTA DE PRENSA


A pesar que el proceso de Independencia de España estuvo motivado en los programas libertarios de la ideología liberal francesa, y el modelo implementado en los Estados Unidos de Norteamérica; en el Perú no se aplicó el liberalismo por la desidia de un grupo de criollos aristócratas racistas, a quienes sólo interesó su crecimiento económico personal, no se sintieron identificados con la patria, y no tenían una visión de país, donde se incluyan a los quechuas, aymaras, y demás etnias que habitan en el territorio peruano.
Así lo sostiene Constante Traverso Flores, autor del libro Los Peruanos, Historia de la Exclusión Social en el Perú, que será presentado el 11 de agosto a las 11 de la mañana en el Paraninfo de la Universidad Nacional de Trujillo (Plaza de Armas-Local central).
Traverso señala que en El Mercurio Peruano, se difundieron las ideas liberales y se debatieron los argumentos para elaborar un proyecto nacional y moderno. “En esa época, el liberalismo era sinónimo de revolución, de cambio. Era la izquierda de hoy”.
La utópica Constitución liberal de 1823 y la de 1828, incorporaron mucho de los conceptos de la Constitución estadounidense, incluyendo la de 1834, pero nunca lograron una vigencia real, ni se implementó el modelo liberal en el Perú como ideología del capitalismo. Por el contrario, se consolidó un modelo ambiguo que acrecentó la exclusión social.
Para Traverso, esta situación cambia cuando el general Andrés de Santa Cruz derrota al régimen nacionalista de Felipe Santiago Salaverry, e inicia la construcción de la Confederación Perú-Boliviana entre 1836 y 1838.
“El general Santa Cruz, le rogó al encargado de negocios norteamericano Samuel Larned, que se quedara en Lima para ayudarlo a implementar el régimen liberal”. El general cusqueño, mestizo, quechuahablante, estaba decidido a construir el capitalismo en el Perú, por eso firmó un TLC con EEUU, uno de los primeros tratados que una nación sudamericana suscribía con la creciente nación norteamericana”, dice.
Pero la aristocracia limeña, liderada por el general Agustín Gamarra y otros militares peruanos como Ramón Castilla, levantaron las banderas de un nacionalismo oligárquico, conservador, para combatir a la Confederación. No dudaron en recurrir al gobierno chileno, para que se les proporcione un ejército y los barcos necesarios para derrotar al general Santa Cruz. Nunca estuvieron de acuerdo con el TLC con EEUU, porque en ese entonces, los norteamericanos ya producían un tocuyo que superaba la tradicional balleta andina. De esta manera, se frustró la posibilidad de implementar el modelo liberal e iniciar la construcción del capitalismo en el Perú; además de consolidar una unidad política con Bolivia, que nos hubiese permitido ser una potencia en el Pacífico sur.
El modelo nacionalista, conservador, oligárquico, se mantuvo hasta 1968 cuando el Gobierno Revolucionario de las FFAA promulga la Ley de Reforma Agraria, y pone fin al abusivo gamonalismo andino y al latifundismo costeño.
A pesar de las reformas del gobierno militar y la restauración democrática en 1980, el segundo periodo del belaúndismo tampoco pudo construir el capitalismo en el Perú. Alberto Fujimori implementó el modelo neoliberal, que fue una receta elaborada por el Congreso y el Tesoro americano, y los organismos financieros internacionales para que los países subdesarrollados paguen su deuda externa.
Los últimos gobiernos han mantenido esta concepción económica que acrecienta la exclusión social.

Trujillo, sábado 06 de agosto de 2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario